Cómo proteger las segundas residencias frente a los okupas

1. Desgaste y Daños a la     Propiedad

○     Deterioro del Inmueble: Las okupas pueden causar daños significativos tanto en el interior como en el exterior de la vivienda. Esto puede incluir desde daños en el mobiliario y electrodomésticos hasta problemas estructurales más serios.

○     Suciedad y desorden: La presencia prolongada de okupas a menudo deja la propiedad en un estado de suciedad y desorden, requiriendo una limpieza profunda y reparaciones costosas.

2. Trámites Legales y     Recuperación de la Propiedad

○     Procesos Legales Largos y Costosos: Recuperar una propiedad ocupada implica iniciar acciones legales que pueden ser prolongadas y caras. Los procedimientos judiciales para el desalojo pueden tomar meses, y en algunos casos, incluso años.

○     Asesoría Legal: Los propietarios a menudo necesitan contratar abogados especializados, lo que representa un gasto adicional significativo.

3. Inseguridad y Estrés     Emocional

○     Ansiedad y Estrés: La incertidumbre sobre el estado de la propiedad y el tiempo que llevará recuperarla genera una gran cantidad de estrés y ansiedad para los propietarios.

○     Miedo a Nuevas Okupaciones: Incluso después de recuperar la propiedad, el temor a futuras okupaciones puede persistir, afectando la tranquilidad del propietario.

4. Pérdida Económica

○     Costos de Reparación y Restauración: Los gastos asociados con la reparación de los daños causados ​​por las okupas pueden ser elevados. Además, los propietarios pueden enfrentar costes por la limpieza y restauración de la propiedad a su estado original.

○     Pérdida de Ingresos: Si la segunda residencia se utiliza como fuente de ingresos a través del alquiler, la okupación impide que el propietario perciba esos ingresos mientras dure la situación.

5. Complicaciones en la     Venta o Alquiler de la Propiedad

○     Desvalorización del Inmueble: Una propiedad que ha sido okupada puede perder valor en el mercado, ya que los potenciales compradores o inquilinos pueden sentirse inseguros o desconfiados.

○     Dificultades para Vender o Alquilar: La reputación de una propiedad que ha sido okupada puede dificultar su venta o alquiler en el futuro.

6. Impacto en la Comunidad     Local

○     Desconfianza Vecinal: La presencia de okupas puede generar un ambiente de desconfianza e inseguridad en el vecindario, afectando las relaciones entre los residentes.

○     Aumento de la Vigilancia: Los vecinos pueden sentirse obligados a aumentar las medidas de vigilancia y seguridad, lo que puede alterar la convivencia en la comunidad.

1º Denuncia inmediata:

●     Acude a la comisaría de policía más cercana para denunciar la okupación.

●     Verificación policía.

●     La policía verificará si la puerta está abierta o cerrada.

●     Si la puerta está abierta y los okupas responden, podrás recuperar tu vivienda.

●     Si la puerta está cerrada y nadie responde, la policía no puede desalojar sin una orden judicial.

2º Proceso Judicial:

●     Si no recupera la vivienda en las primeras 48 horas, debe proceder por vía judicial.

●     Contrata un buen abogado y espera a que el juez emita una orden de desalojo.

3º  Consecuencias y Retos:

●     Proceso Largo y Costoso: El proceso judicial puede tardar años y suelen declararse insolventes para evitar sanciones económicas.

●     Estrés y Ansiedad: La incertidumbre y el largo proceso judicial generan un gran estrés para los propietarios.

●     Instalación de Puertas Anti Okupa: Estas puertas proporcionan una barrera física robusta contra los intentos de entrada ilegal.

●     Sistemas de Seguridad y Vigilancia: Cámaras de seguridad, alarmas y sistemas de monitoreo remoto pueden disuadir a los okupas y alertar a los propietarios oa las autoridades de cualquier intento de intrusión.

●     Contratar Servicios de Mantenimiento y Vigilancia: Tener un servicio regular de mantenimiento y vigilancia puede ayudar a mantener la propiedad en buen estado y menos vulnerable a la okupación.

●     Vecinos y Comunidades: Fomentar buenas relaciones con los vecinos y la comunidad local puede proporcionar una red de apoyo y vigilancia adicional.

Proteger las segundas residencias frente a los okupas es una preocupación legítima y creciente en España. Con las medidas adecuadas, los propietarios pueden asegurar sus propiedades y disfrutar de la tranquilidad de saber que sus hogares están protegidos, incluso cuando no están allí.

●     Alta Protección: Fabricada en acero muy resistente, ofrece una protección total contra okupas y ladrones.

●     Cerradura de Máxima Seguridad: Incluye cerraduras anti bumping, anti rotura y anti taladro, impidiendo su apertura con técnicas comunes de robo.

●     Acceso Controlado: Puedes abrirla cuando quieras sin necesidad de desmontarla; solo tú tienes acceso.

●     Instalación Sencilla: Se instala en el marco original de la puerta sin necesidad de realizar obras ni causar daños.

●     Estética Atractiva: Disponible en múltiples acabados, combina seguridad con un diseño atractivo.

●     Versatilidad: Puede instalarse y desinstalarse fácilmente en cualquier momento.